El resort más oculto de Bali, una excelente transición a otro mundo
Bali, en Indonesia, es una isla en la que viven más de 20.000 templos. Es por ello que Bali recibe el nombre de La isla de los mil templos o La isla de los dioses.
Así, el resort Four Season Sayan, a solo quince minutos de la ciudad de Ubud, es conocido por su puente colgante, permite a los clientes del hotel flotar sobre las copas de los árboles. Llegar a atravesarlo supongo cruzar a una parte del mundo totalmente diferente donde la naturaleza es protagonista. El hotel está situado en las tierras altas del centro de la isla, y para llegar a él se puede hacer en barca.
“El resort es bien conocido por su mágica llegada a la azotea. Muchos huéspedes se detienen e incluso lloran al cruzar el puente, llenos de asombro, escuchando la ‘sinfonía’ del bosque y descendiendo al hotel desde las copas de los árboles. Esta nueva llegada por río ofrece la vista opuesta con una revelación lenta desde debajo del dosel de los árboles, lo que lo hace perfecto para los huéspedes que repiten que han experimentado la llegada al puente antes”, comenta el gerente del resort Gianni Costa.
“No se siente como una experiencia de check-in, sino más bien una transición a otro mundo, bienvenida por las personas más amigables de la Tierra”.
El resort supone la presentación de un hotel de lo más curioso. Tiene forma de cuenco de arroz, un guiño a los numerosos campos de arroz de la isla. Además el paisaje queda marcado por el valle del río Ayung.
El resort se divide en varias villas, dependiendo de la ocupación. Desde una villa con un dormitorio a una villa con tres dormitorios, para poder acceder a él es necesario atravesar una especie de tejado por el que se puede caminar que recibe el nombre de rooftop. Las villas, algunas de ellas, cuentan con una sala de meditación, un santuario privado y una piscina de ensueño.
En total son 42 villas con piscina privada y 18 suites. El interior de las estancias están decoradas con una mezcla entre contemporáneo y estilo balinés, que incluye muebles de teca y telas exóticas tejidas a mano.
Desde el hotel se puede ver también el agua color esmeralda de Bali. En el hotel se pueden reservar salidas para poder ver los tesoros ocultos. Algunos de ellos como los míticos campos de arroz. También se observarán los paisajes volcánicos y el clima de Bali. La experiencia incluye la visita a una villa Spa para llevar a cabo un ritual purificador y relajante, seguido d un almuerzo propio de los agricultores.
El Four Season ofrece además gran cantidad de actividades fuera del complejo, como la visita guiada a templos “secretos”, así como lugares aclamados por la historia de la isla como la presa histórica perteneciente al sistema de riego subak de Bali, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
También se pueden realizar excursiones en bicicleta por los campos de arroz, programar una limpieza por curanderos locales o incluso ver algunos talleres de artistas. Yoga y cursos de cocina también se podrán contratar.
Así, el resort Four Season Sayan, a solo quince minutos de la ciudad de Ubud, es conocido por su puente colgante, permite a los clientes del hotel flotar sobre las copas de los árboles. Llegar a atravesarlo supongo cruzar a una parte del mundo totalmente diferente donde la naturaleza es protagonista. El hotel está situado en las tierras altas del centro de la isla, y para llegar a él se puede hacer en barca.
“El resort es bien conocido por su mágica llegada a la azotea. Muchos huéspedes se detienen e incluso lloran al cruzar el puente, llenos de asombro, escuchando la ‘sinfonía’ del bosque y descendiendo al hotel desde las copas de los árboles. Esta nueva llegada por río ofrece la vista opuesta con una revelación lenta desde debajo del dosel de los árboles, lo que lo hace perfecto para los huéspedes que repiten que han experimentado la llegada al puente antes”, comenta el gerente del resort Gianni Costa.
“No se siente como una experiencia de check-in, sino más bien una transición a otro mundo, bienvenida por las personas más amigables de la Tierra”.
El resort supone la presentación de un hotel de lo más curioso. Tiene forma de cuenco de arroz, un guiño a los numerosos campos de arroz de la isla. Además el paisaje queda marcado por el valle del río Ayung.
El resort se divide en varias villas, dependiendo de la ocupación. Desde una villa con un dormitorio a una villa con tres dormitorios, para poder acceder a él es necesario atravesar una especie de tejado por el que se puede caminar que recibe el nombre de rooftop. Las villas, algunas de ellas, cuentan con una sala de meditación, un santuario privado y una piscina de ensueño.
En total son 42 villas con piscina privada y 18 suites. El interior de las estancias están decoradas con una mezcla entre contemporáneo y estilo balinés, que incluye muebles de teca y telas exóticas tejidas a mano.
Desde el hotel se puede ver también el agua color esmeralda de Bali. En el hotel se pueden reservar salidas para poder ver los tesoros ocultos. Algunos de ellos como los míticos campos de arroz. También se observarán los paisajes volcánicos y el clima de Bali. La experiencia incluye la visita a una villa Spa para llevar a cabo un ritual purificador y relajante, seguido d un almuerzo propio de los agricultores.
El Four Season ofrece además gran cantidad de actividades fuera del complejo, como la visita guiada a templos “secretos”, así como lugares aclamados por la historia de la isla como la presa histórica perteneciente al sistema de riego subak de Bali, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
También se pueden realizar excursiones en bicicleta por los campos de arroz, programar una limpieza por curanderos locales o incluso ver algunos talleres de artistas. Yoga y cursos de cocina también se podrán contratar.
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